En 1994, Gehenna lanzó First Spell, un trabajo que encapsula la esencia más melódica y atmosférica del black metal noruego. Con una producción envolvente, uso prominente de teclados y una estética sombría, el EP se destacó en una escena dominada por la crudeza y la agresividad. Este material representa un punto clave en la evolución de la banda y del subgénero más sinfónico del black metal, posicionando a Gehenna como un acto con identidad propia dentro del movimiento.
Desde su lanzamiento, First Spell ha recibido opiniones mixtas. Para algunos críticos y seguidores, este trabajo es una joya dentro del black metal melódico, con una atmósfera que evoca misterio y oscuridad sin perder la esencia agresiva del género. La combinación de guitarras distorsionadas con teclados sombríos fue vista como una jugada arriesgada pero efectiva, alineada con las tendencias que posteriormente definirían el black metal sinfónico.
Por otro lado, algunos puristas del género criticaron el EP por su sonido relativamente más refinado y menos crudo en comparación con otros lanzamientos de la época. En un momento donde el black metal estaba caracterizado por una producción lo-fi y un enfoque más primitivo, el estilo de Gehenna fue recibido con escepticismo por sectores que veían con recelo cualquier desviación de la fórmula tradicional. Sin embargo, con el tiempo, First Spell ha sido reevaluado y reconocido como un trabajo importante en la diversificación del sonido del black metal.
Las letras de First Spell se sumergen en temas místicos, oscuros y ocultistas, elementos que han sido una constante en la carrera de Gehenna. La imaginería de sus composiciones evoca paisajes sombríos, visiones de lo desconocido y referencias a rituales arcanos, elementos que refuerzan la atmósfera hipnótica del EP.
A diferencia de algunas bandas contemporáneas que exploraban la misantropía y la violencia explícita en sus letras, Gehenna optó por un enfoque más esotérico y etéreo, reforzando la sensación de un viaje a través de reinos ocultos y dimensiones prohibidas. Este uso del lenguaje y la temática encajó perfectamente con la instrumentación melancólica y evocadora del álbum.
Si bien First Spell no estuvo envuelto en escándalos mediáticos de la magnitud de otros lanzamientos de la escena noruega, su sonido fue un punto de debate dentro del black metal. La inclusión prominente de teclados y pasajes melódicos generó división entre los seguidores más ortodoxos del género, quienes veían con desconfianza cualquier elemento que suavizara el sonido crudo característico de la época.
El black metal noruego estaba marcado por una fuerte ideología de rechazo a las influencias externas y un culto a la crudeza y la autenticidad. En este contexto, bandas como Gehenna, que exploraban una producción más elaborada y arreglos más complejos, a menudo eran vistas con cierto recelo. Sin embargo, la banda nunca abandonó su esencia ni cedió a las críticas, manteniendo su identidad sonora a lo largo de los años.
Con el paso del tiempo, First Spell se ha consolidado como un referente dentro del black metal atmosférico. Su impacto puede percibirse en numerosas bandas que han seguido una línea similar, incorporando teclados y estructuras más melódicas sin perder la esencia oscura y mística del género.
A pesar de no haber alcanzado la notoriedad de otros lanzamientos de la época, el EP sigue siendo apreciado por los fanáticos del black metal que buscan un sonido más evocador y etéreo. Su influencia es evidente en la evolución del black metal sinfónico y en bandas que posteriormente adoptaron elementos similares para expandir los límites del género.
En retrospectiva, First Spell representa una obra clave dentro del catálogo de Gehenna y una pieza fundamental en la diversificación del black metal de los años 90. Su capacidad para fusionar la oscuridad con la melodía sigue resonando en la escena, consolidándolo como un clásico de culto dentro del género.